martes, 31 de enero de 2012

Meteorix 5.9 No Aprobado #31

Aldo y el May se apresuran para “salvar” a sus chicas, que son llevadas por los gringos a una carroza donde la seducción continua. Peewee duda en aprovecharse de Lucy pero Morty no tiene reparos en meterle la lengua a Eva. Ella se resiste, curiosamente mientras se acordaba de Meteorix y hasta de Aldo, gritando por instinto. Aldo y el May entran, rompiendo la puerta, pero Morty sólo se ríe, indicando que Eva y Lucy andan ahí de ofrecidas por voluntad propia. El efecto del nanochip obliga a Eva a confirmar sus palabras, decepcionando a Aldo que por fin la ve como la zorra que es (aunque en el número anterior decía que no le extrañaba verla de resbalosa con el gringo ¿la conoce o no la conoce?). El May hace su propia escenita al ver a Lucy con el otro (¿no sabían ya que las dos se fueron a lo oscurito pues?) e invita a Aldo a irse con él, alegando que ellas no valen la pena. Tratan de hacerse los machotes pero al poco de haberse alejado ya están llorando como bebes porque les rompieron su corazoncito.
El May sugiere que no les queda de otra que seguir el ejemplo de su padre, pasando a una retrospectiva del May de pequeño viendo a Don Carmelo ponerse ebrio hasta las orejas para superar la perdida (o más bien, el abandono) de Santa. Pero si se acuerda de ella cuando toma y ellos quieren olvidarse de Eva y Lucy…. ¿no es un recurso contraproducente? Como sea, los dos tarados van a comprarse latas y botellas de cerveza (de la marca, “Conroña”).
Aldo regresa muy borracho a su casa, tropezándose con Nandito que también está ebrio pero de algún modo él sabe disimularlo para apoyar a su madre en la regañiza que le pone. La mujer lloriquea por tener tan mal hijo mientras que el borracho Aldo sólo se pone a decir incoherencias y a vomitarse encima de su hermano.
Su padre no tarda en llegar y de inmediato carga con Aldo para meterlo a la regadera dándole un baño de agua helada hasta que se le pase el efecto. Ya algo recuperado, aunque tiritando, torpemente, el padre lo anima a darle una explicación del motivo que lo llevó a beber, pero el menso no suelta nada y desvia la conversación al mencionar que las borracheras no son como en la televisión (¿pues como creía que eran?). Confiesa haber bebido apenas media lata, haciendo que su padre se burle del poco aguante comentando como en su juventud él podía tomarse hasta 2 litros de vodka, avergonzándose al instante y dejándolo solo (buena onda de padre pero pésimo en el trabajo de consejero ¿no creen?).
En casa del May, la cosa está más triste cuando éste le explica a su padre que sólo siguió su ejemplo para acordarse de su madre pero que a él no le tocó verla. Disculpandose y no dándole importancia a su falta, Don Carmelo va directamente a la botella, lamentandose por enésima vez de la ausencia (abandono) de Santa.
Resintiendo los efectos secundarios del alcohol, Aldo y el May van a la secundaria pese a estar expulsados, con el pretexto de seguir vigilando a Eva y a Lucy (¿no se habían rendido?), saltándose la barda para entrar. Los del KFG se estaban escapando pero al ver como Aldo se mete y recordando que por algo lo hicieron miembro honorario de su pandilla (aunque jamás hicieron el dichoso evento en que lo harian oficial), lo consideran un método extremista de protesta contra la opresión (¿Cuál? ¿el de una secundaria publica?), y siguen su "ejemplo" para volverse a meter.
Aldo y el May burlan a Don Chencho (como siempre, bien briago durante su descanso), y se esconden para espiar a Eva y a Lucy con sus galanes. Ellos las invitan a una cita en la noche que ellas atienden bajo el evidente efecto de la hipnosis del nanochip. Morty se confía en como las harán suyas, lo que Aldo y el May juran impedir (metiches).
Más tarde, Lucy se arregla, todavía como autómata, dejando esposado y encadenado a Lalo con suficiente comida (servida en plato para perro), totalmente ajena a sus protestas y amenazas. Lo mismo hace Eva, sólo que ella le habla al aire antes de salir (como siempre, su madre no está en casa).
Al poco rato, ya están entrando en el centro nocturno, Lobomba (vaya, esta referencia a Lobombo si que es muy mal gusto). Metiéndose en unas cajas, Aldo y el May consiguen que los metan, dispuestos a todo por librar a sus chicas del embrujo de los gringos.
Contenido extra:
• Resumen del capitulo anterior y cuestiones intrigantes sobre el desarrollo de los eventos.
El buzón de los Reprobados; transcriben y responden cartas de lectores, Galería de Reprobados y Cibercuates.
• Páginas sobrantes siguen sirviendo para el formato de solicitud de números atrasados y publicidad de la revista de Rugrats.
• En el espacio de debajo de la segunda de forros, por primera vez, promocionan la Precuela de Cazandra, un proyecto que jamás logró publicarse pero mantuvo a los lectores a la expectativa por muuuuuucho tiempo.
• En la contraportada, Jorge Zúñiga (El Zu), un colaborador de Editoposter, ofrece un pin-up de Aldo huyendo de mutantes dinosaurios, Tatema y Morder sobre un robot y su madre con el cinto en la mano.

Curiosidades, señalamientos y/u objeciones:
• En la portada, el elenco de Meteorix hace parodia de personajes de videojuegos de Capcom.

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