Meteorix 5.9 No Aprobado #19

Un nuevo escenario nos es introducido por donde se ubica el volcán Popocateptl, con un par de especialistas pendientes de las señales de actividad que ha dado últimamente (justamente así estaba la cosa con el dichoso volcán por las fechas en que se publicó esto). Un misterioso sombrerudo con jorongo y un bastón aparece, saludando al volcán y mofándose de los expectantes, alegando que “Don Goyo” sólo está jugando. Los dos se espantan y el tipo misterioso desaparece tan rápido como llegó.
Cazandra busca el medio de transporte más rápido que encuentra para llegar al museo: el microbús, donde le toca ser acosada sexualmente.

Eva, desnuda de nuevo, deambula entre las ruinas del museo y consigue unos pergaminos antiguos para taparse, necia en buscar a su Meteorix para que la defienda (¿no hacia eso hace rato?).
Meteorix le da un trancazo a Coatlimorphus, haciéndolo “sangrar” con sus ataques pero sólo es su estrategia para lanzar su sustancia sobre una estatua de Tlaloc, reanimándolo como “Tlalocman”, duplicando su problema. Los del noticiero sigue cubriendo la destrucción que ahora provocan los dos monstruos en lo que el menso de Meteorix trata de pensar en otra estrategia.
Cazandra presiona al conductor para que le permita bajarse y usa la “transmutación felina” para volver a su forma original (con un efecto que golpea a la profesora Eskuli y su esposo, que andaban otra vez de calenturientos en los arbustos).

Llega muy tarde para impedir que Meteorix destruya a ambos mutantes con un rayo de energía descomunal, dándose taco pero ella le explica que ese tipo de mutante es capaz de fusionarse con cualquier objeto que toque. Vemos que su temor no era para menos, ya que los restos de Metamorphus van haciendo que cobren vida otras estatuas y monumentos de la ciudad (como el Ángel de la Independencia), dando origen a todo un ejército de monstruos.
Los fanáticos neomexicas (así los denominan), están por sacrificar a Lucy cuando el May los interrumpe, confiándose y siendo noqueado por un golpe por la espalda, recuperando la conciencia cuando ya lo tienen amarrado sobre la misma tabla ceremonial que ella.
Doble M sigue disfrutando del caos que ha desatado, presumiéndolo ante Morder, quien junto con Tatema, observa todo desde la base. Morder sigue quemándose ante su subordinado por las insinuaciones de lo que tuvo con Doble M, siendo cada vez menos convincente (y menos cuando le da por comentar que tiene lencería más fina que él).

Doble M todavía le manda un beso para irritarlo más cuando notan en la pantalla la presencia de Cazandra. Doble M recibe la orden de eliminarla y se dispone a cumplirla, encantado.
Contemplando el ejercito de monstruos, Cazandra y Meteorix intentan acordar un plan (por primera vez, ella aprovecha para presentarse ante él, harta de que le ponga apelativos en base a su aspecto felino, aunque usa el nombre de “Kazandra” todavía no lo definen del todo). Meteorix descubre que tocar su tatuaje en la frente ya no le permite invocar su armadura (por la energía perdida), limitando sus fuerzas. Por el poco espacio del que disponen en este capitulo no puede explicarle nada fuera de atacar por separado. Meteorix se lanza de volada y Doble M la ataca por sorpresa, sacando por fin las garras (iniciando, por así decirlo, una pelea de gatas).

Eva se aproxima a los neomexicas para que le ayuden a buscar a Meteorix pero lo único que consigue es acompañar a Lucy y al May. Compartiendo su destino como vírgenes de sacrificio.
En una tienda de abarrotes cercas de donde está el volcán, el dependiente y un cliente ven a Joaquín (nunca dan su apellido aunque ya todos sabemos cual es, quizá parodiado no podría sonar peor, je, je) en el noticia siguiendo con la cubertura de la invasión de monstruos en la ciudad. El sombrerudo anda por allí, tomándose una soda de trago, y se retira enseguida, invocando un relámpago y dejando la feria entre el humo de su salida (vaya estilo tanto como para irse como para pagar).
Entre Meteorix batallando con las contrapartes de Metamorphus y Cazandra lidiando con Doble M, no hay nadie que salve a los tres “vírgenes” (de acuerdo a la impresión del May, Eva no cuenta como tal), cuando hace su espectacular entrada el misterioso sombrerudo.

Contenido extra:
• Resumen del capitulo anterior y cuestiones intrigantes sobre el desarrollo de los eventos.
• El buzón de los Reprobados; por esta vez les da por no transcribir las cartas de los lectores y dejar sólo espacio para amigos por correspondencia (por así decirlo porque ahora son puras direcciones de correo electrónico) y presentar algunos dibujos de los lectores. Una página entera es dedicada para hacerle el favor a otra publicación de ser promocionada, Mystic, la cual tuvo una distribución que, por lo visto, estuvo más limitada que Meteorix (aunque sin duda fue una mejor producción).
• Las páginas sobrantes (la 11 y la ultima) son utilizadas para presentar el formato para pedir números atrasados y todavía promocionar los bordados adheribles de Digimon. En la contraportada hacen publicidad de la revista Seinen (que nunca le llegó a los talones a Conexión Manga).

Curiosidades, señalamientos y/u objeciones:
• Las páginas 22 y 23 son colocadas en el orden incorrecto (es decir, al revés), siendo la primera de sus metidas de pata significativas en la edición (aja, no será la ultima).
* ¿Serè la unica persona que encuentra obsceno que Katzandra nos estè dando el trasero en la portada?