Una de las iniciativas más memorables,
aplaudidas y originales de Televisa fue la que los llevó a publicar las diez mejores
sagas en la historia de Marvel a través de una encuesta, comprendiendo dos inmensos
volúmenes cubiertos en formato Marvel Ómnibus. Sí, diez historias que
los mismos lectores escogieron, una selección que destila buen gusto,
construyendo este amplio recorrido entre la nostalgia y las tendencias modernas
(que pretenden indicar que los clásicos nunca pasan de moda).
Ambas ediciones se publican entre mediados
y finales de 2010. Cada tiene la peculiaridad de ofrecernos un orden cronológico
entre los diversos eventos, variando entre los protagónicos (de modo que
tenemos uno de cada sabor, satisfaciendo a todos).
El volumen 1 parte con la trilogía que
comprende La llegada de Galactus, un clásico invaluable en la historia
de los Fantastic Four que repercutiría para siempre en el resto del Universo
Marvel. En medio de otras tramas familiares (como el conflicto de los Inhumans
atrapados en su propio refugio), se introduce a Silver Surfer junto, por
supuesto, el gran Galactus (y Wyatt Wingfoot, pero eso ya es mera
casualidad).
De aquí proseguimos con La
(inolvidable) muerte de Gwen Stacy (seguida por la del Green Goblin
original), una tragedia histórico que rompe todo un ciclo de inocencia en el
cómic, demostrando que los superhéroes no siempre pueden salvar a todos, ni
siquiera a los que aman. Esta peculiar historia de dos partes ya ha sido
publicada en varias ocasiones en México (pero si la mayoría lo decidió, es
evidente que una más no hace daño).
En medio tenemos un sabor que parece
nuevo, debido a lo raro de su explotación. El demonio en la botella, la
serie de incidentes que derivan en uno de los episodios más memorables de Iron
Man (también introducen a uno de sus mayores enemigos: Justin Hammer),
mostrando su vulnerabilidad ante el peor enemigo que incluso los lectores podríamos
llegar a tener: el alcoholismo. Sobra decir que es la primera vez que dicho
material llega a publicarse en México, pero ya era por todos conocidos y la mayoría
consideró que ya era momento de que lo tuviéramos, traducido al español y
compilado.
A esto le sigue Días del Futuro Pasado,
uno de los más lúgubres episodios de los X-Men. Un futuro sin esperanza
y la lucha de los mutantes por impedir que ocurra, sin ofrecernos garantía alguna
de que sus esfuerzos harán una diferencia. Editorial Vid ya lo había publicado
antes, pero ante un considerable paso del tiempo y el entusiasmo de los
lectores, tuvo que incluirse en esta edición. No sería la última vez que
Televisa publicaría esta historia.
Y para el cierre, tenemos un caso muy
similar. Otro tesoro por el que Vid tomara la iniciativa, nos es traído de
vuelta: Infinity Gauntlet. La gran batalla de todos contra Thanos, el
Titán Demente, en uno de sus más memorables y extraordinarios escenarios,
una historia en la que todo podía suceder y sucedió, incluyendo la muerte (que
se revertiría al final) de varios personajes. Tampoco sería la última vez que
Televisa explotaría esta historia, al grado de relanzarla en formato Marvel
Deluxe en 2013 y todavía una vez más en Marvel Omnibus en 2018 como
parte de su “Colección Thanos.”
Ewww
Y la acreditación respectiva de su
contenido se nos recuerda de la siguiente manera:
- La llegada de Galactus: Stan Lee (historia), Jack Kirby (dibujo)
- La muerte de Gwen Stacy: Gerry Conway (historia), Gil Kane (dibujo)
- El demonio en la botella: David Michelinie (historia), John Romita Jr (dibujo)
- Días del Futuro Pasado: Chris Claremont (historia) John Byrne (dibujo)
- El Guantelete Infinito: Jim Starlin (historia), George Peréz, Ron Lim (dibujo)
Definitivamente, uno de los mayores logros
de Televisa, siendo la única inconveniencia la pesadez (en ambos sentidos) que
implica su extensa lectura.
Una selección rica, variada y amplia de lo
mejor de lo mejor del Universo Marvel en esta primera mitad de las diez sagas
seleccionadas.
Marvel
Omnibus Sagas Volúmen Uno
La llegada de Galactus
(1966)
Fantastic Four #48 (¡La llegada
de Galactus!): El plan del demente Maximus sale mal gracias a la
intervención de los FF y Black Bolt, demostrando que los Inhumans no son
demasiado diferentes de los humanos. En su locura, Maximus activa un sistema
que sella su refugio, aislándolo completamente del exterior, y los FF apenas
logran salir a tiempo (muy a pesar de Johnny que no quería separarse de
Crystal). El cuarteto regresa a Nueva York, presenciando un extraño fenómeno de
inofensivas llamas que llenan el cielo (ocasionando que la gente entre en
pánico y culpe a Human Torch). Reed se encierra para investigar al respecto
conforme el fenómeno cambia a escombro espacial que obstruye al cielo. El
Vigilante se presenta ante ellos, revelando su autoría, medidas que ha decidido
tomar medidas para ocultar a la Tierra del heraldo de Galactus, Silver Surfer.
Sus esfuerzos son inútiles y Surfer se presenta de todas formas, enviando la
señal hasta su amo, antes de que Thing pueda descontarlo de un golpe después de
que lograra burlar a Torch. En breve, Galactus, el Devorador de Mundos, hace
acto de presencia, declarando el fin de la Tierra.
Fantastic Four #49 (¡Si este
fuera el Día del Juicio!): El Vigilante y los FF intentan convencer a
Galactus de retirarse y dejar a la Tierra en paz, pero éste hace oídos sordos.
Las provocaciones de Thing y Torch sobre su persona son inútiles,
sacudiéndoselos como si fueran insectos, por lo que el cuarteto se retira para
esperar indicaciones del Vigilante. Éste les explica cómo funciona el
Convertidor Elemental de Galactus con el que asola a los planetas, ofreciéndoles
el único recurso que podría detener su propósito al que solo Torch podrá tener
acceso. Thing rompe la máquina de Galactus (indicando que eso apenas retrasará
el proceso ya que pueda reconstruirla enseguida), incitándolo a enviar a su
guardia, Punisher, un ser de pura fuerza y energía con el que ahora tendrá que
lidiar el resto del cuarteto. El Vigilante se lleva a Johnny, atravesando
tiempo y espacio para emprender un viaje rumbo a la inmensa estación especial
de Galactus donde se encuentra el arma que lo derrotará. Considerando que sus
opositores tuvieron suficiente, Galactus retira a Punisher y reanuda su
esfuerzo por consumir las energías del planeta. Paralelamente, Silver Surfer
termina conociendo a Alicia Masters, cuya bondad termina por penetrar en su
frío exterior, convenciéndolo de que la vida es preciosa y debe rebelarse en
contra de su amo.
Fantastic Four #50 (¡La
extraordinaria saga de Silver Surfer!): Surfer interviene y desafía a
Galactus, emprendiendo un duelo cósmico en lo que Torch regresa, bastante
afectado por la experiencia que sufrió para obtener el Anulador Supremo. El
Vigilante confía el arma a Reed, utilizándola para amenaza a Galactus, quien
sabe que al activarla bien podría destruir el universo entero. Galactus promete
desistir de su intención de consumir a la Tierra y partir, no sin antes
castigar a su antiguo heraldo, exiliándolo en ese planeta, quitándole la
libertad de recorrer el cosmos. Surfer no tiene más remedio que aceptar el
castigo, despidiéndose por un rato de Alicia (indicando ante los ojos de Thing
que su amada tiene preferencia por el visitante plateado, sumiéndolo en un
estado de amargura del que no saldrá pronto). La crisis termina con opiniones
divididas entre la población (algunos como a J. Jonah Jameson piensan que todo
fue una farsa, y a otros les interesa más saber por qué Thing anda tan
malhumorado por las calles) y los FF siguen adelante. Johnny ingresa a la
Universidad Metro donde conoce a Wyatt Wingfoot.
La muerte de Gwen Stacy
(1973)
Amazing Spider-Man #121 (La noche que Gwen
Stacy murió): Al caer Harry bajo los efectos de otra sobredosis de drogas,
enferma nuevamente y su condición, sumada a un irracional odio hacia Peter
Parker y malas jugadas en sus negocios, provocan que Norman revierta a Green
Goblin una vez más. Como siempre, su vendetta contra Spider-Man es prioridad y
secuestra a Gwen, llevándola al puente George Washington, dejando un claro
mensaje a Spider-Man. Spidey se sobrepone a una gripe que le pegó tras su viaje
a Canadá y lucha desesperadamente, pero no puede evitar que Goblin arroje a
Gwen del puente. Aunque frena su caída, ella muere irremediablemente y jura
matar a Goblin.
Amazing Spider-Man #122 (¡La última batalla del
Duende!): Spidey arremete contra Goblin, pero éste logra escapársele. La
policía acude y malentienden los hechos en torno a la muerte de Gwen y Spidey
no ayuda en nada al declarar que él “la mató” (sin especificar que se refiere a
que es la consecuencia indirecta de que ella se enamorara de sualter ego). Desesperado,
solicita ayuda de Robertson para conseguir un pitazo que le da la localización
de Norman Osborn. Ya teniéndolo cercado, procede a atacar, pero se detiene
antes de matarlo a golpes. Goblin aprovecha para atacarlo por la espalda con su
deslizador, pero Spidey se agacha y es él quien muere empalado.
Iron Man: El demonio en la
botella (1979)
Iron Man #120 (El viejo y el
príncipe del mar): Tony Stark lidia con el estrés de conflictos recientes cuando
se produce un disturbio en el avión en que viajaba. Se cambia a Iron Man para
salvar al resto de los pasajeros, descendiendo para confrontar a supuestos
militares que revelan que Namor es el responsable, en su empeño por retener a
un anciano ermitaño en una isla que ellos llevan tiempo ocupando. Iron Man
enfrenta a Namor, pero al sumergirse, un desperfecto en su armadura ocasiona
que se hunda.
Iron Man #121 (Una treta de
nombre cualquiera): El mismo Namor rescata a Iron Man, arrastrándolo a la
superficie donde recupera la consciencia, aclarando que tiene una deuda de vida
con el ermitaño que lo salvó tras intoxicarse al nadar cerca de las plataformas
petroleras de los invasores de la isla. Por su parte, Rhodey y Bethany Cabe
buscan a Tony y terminan siendo capturados por los militares, revelándose la
operación como una fachada de la inescrupulosa compañía Roxxon. Iron Man se une
a Namor para destruir tanto sus fuerzas como sus instalaciones mientras Rhodey
y Beth se liberan. Los villanos borran toda evidencia, destruyendo la isla.
Iron Man #122 (¡Viaje!):
Tras despedirse de Namor y los demás, Iron Man emprende el viaje de regreso,
retrocediendo hacia sus orígenes (exactamente la misma historia que ya
conocimos en Tales of Suspense #39). Mientras, Justin Hammer, el
responsable de haber ocasionado el fallo en el mar, aparece para indicar que no
ha terminado con el héroe blindado.
- Tras despedirse de Iron Man, el escritor debe adentrarnos en los pensamientos de Namor, describiéndonos hasta el más mínimo detalle con esta sospechosa narración: “Namor se encoje de hombros-un movimiento que es realizado de manera graciosa y sensual debido al poder de su cuerpo-y desciende rápidamente.” ¿Alguien olvidó que no estamos escribiendo una novela erótica?
Iron Man #123
(¡Casino Fatal!): Tras pasar un rato como Iron Man, Tony regresa a su
compañía donde Beth le reprocha su falta de consideración hacia ella y Rhodey
que arriesgaron su vida por él en lugar de su guardaespaldas (Iron Man). Para
contentarla, Tony se la lleva a un casino en Atlantic City, convirtiendo la
cosa en una velada romántica, siendo interrumpida por la intromisión de los
villanos Blizzard, Melter y Whiplash que han venido a asaltar el lugar (por
órdenes de Hammer). Por supuesto que Tony debe separarse de Beth y cambiarse a
Iron Man para detenerlos, pero es sorprendido por la estrategia de Blizzard y
Melter que combinan sus controles opuestos sobre la temperatura, dejándolo
paralizado y a merced del ataque letal de Whiplash.
- La misma anciana que Tony sacó a empujones del baño en el avión para cambiarse a Iron Man (en el #120) reaparece para volver a sufrir el mismo maltrato en el casino, reaccionando con un intento de insulto similar (antes lo llamó “¡Filisteo!”, ahora le dice “¡Pagano!”).
Iron Man #124 (¡Trozos
de odio!): Gracias a la intervención de Beth, Iron Man se libra y derrota
prontamente a Blizzard y a Melter mientras ella descuenta a Whiplash. Beth
reprocha a Iron Man el no hacer su trabajo que es proteger a Tony, a lo que
éste replica que solo pensó que debía darle prioridad a los asistentes del
casino. Poco después, Iron Man debe asistir a la firma de un contrato con el
embajador de la nación de Carnellia, en nombre de Stark International,
reencontrándose con Beth (contratada para garantizar la seguridad del
embajador). A distancia, Hammer asegura que Iron Man se ponga en la posición
que necesitan para llevar a cabo su plan, activando su rayo repulsor al encontrarse
detrás del embajador, matándolo frente a todas las cámaras.
Iron Man #125 (Preludio
a Mónaco): Beth repudia a Iron Man junto con cientos de testigos por lo que
parece una imprudente acción. Convence a la policía de que lo dejen ir para
aclarar todo (indicándoles que no podrá hacerlo si lo arrestan), y más tarde,
como Tony, discute con Beth al respecto. Manteniendo el anonimato de su
“guardaespaldas”, Tony entrega la armadura (retirándole la mayor parte del
armamento para que no le den malos usos) a las autoridades y anuncia la
suspensión de éste como líder de los Avengers, cediéndole el puesto a Cap de
manera temporal. Aprovecha la ocasión para solicitar clases de defensa personal
del Cap, dándole una dedicación intensa (para así no sentirse vulnerable al
prescindir de la armadura). Después, contacta a Scott Lang para que, como
Ant-Man, interrogue a Whiplash en prisión (habiendo escuchado que él y sus
compañeros mencionaron el nombre de Hammer). Rhodey acompaña a Tony hasta
Mónaco, siguiendo la pista, pero no tardan en ser rodeados por un escuadrón de
hombres uniformados enviados por Hammer.
Iron Man #126 (¡El golpe de
Hammer!): Rhodey es descontado y dejado de lado mientras que Tony es
llevado ante el mismo Hammer, confesando su autoría en los incidentes
recientes, cuyo fin es arruinar su compañía para enaltecer la suya (la cual ya
se quedó con el contrato que deseaban con la nación de Carnellia),
desarrollando un dispositivo que toma el control a distancia de la armadura de
Iron Man. Hammer también confiesa tener bajo su nómina a varios de sus
enemigos, proveyéndolos de equipo a cambio de un porcentaje considerable de sus
atracos. Tony intenta escapar, pero descubre que la residencia privada de
Hammer en realidad es una isla, no quedándole más remedio que someterse.
Mientras Hammer atiende unos asuntos, Tony emplea una astuta treta para
encargarse del guardia que lo vigilaba, accediendo a la armadura de repuesto en
su portafolio tras descontar al resto (demostrando que sirvieron de algo las
lecciones de Cap). Sin embargo, al enterarse Hammer de su escape, envía al
resto de sus empleados (que además del trío recientemente liberado de prisión,
incluyen a Constrictor, Beetle, Porcupine, Leap-Frog, Stilletto, Discus,
Man-Killer, Water Wizard y Spymaster) para que se encarguen de éste.
Iron Man #127 (¡El hogar de
un hombre es su campo de batalla!): Iron Man supera las dificultades de
lidiar con una cantidad excesiva de enemigos, recibiendo la oportuna asistencia
de Rhodey y sus amigos del ejército, asaltando y destruyendo la propiedad de
Hammer. Los villanos que pueden escapan (incluyendo a Hammer, por supuesto),
pero Iron Man se asegura de capturar al científico que construyó el dispositivo
que contralaba su armadura para presentar evidencias. Iron Man es exonerado
(aunque ante una niña inocente que no comprende nada seguirá siendo un monstruo
aterrador que asesinó a alguien en la tele), pero la tensión entre Tony y Beth
permanece. Al entregarse a una parranda intensa e irresponsable que implicó
darle un tour por la mansión de los Avengers a una suripanta, Tony insulta a Jarvis,
ocasionando su inmediata renuncia a la mañana siguiente. Hasta ese momento,
Tony comprende que estuvo culpando a su alter ego de sus recientes problemas,
cuando en realidad era él mismo la causa (ignorando al verdadero responsable: su
dependencia alcohólica).
Iron Man #128 (¡El demonio
en la botella!): En su negación, Tony decide renunciar a sí mismo y solo
ser Iron Man, pero casi enseguida tiene un pobre desempeño al intentar ayudar
con un desastre (propiciando una evacuación) que hace más evidente su problema.
Al verlo a punto de servirse un trago, Beth comparte su experiencia personal
con su esposo fallecido, quien se volviera dependiente de las pastillas y
muriera a causa de esto. Tony termina suplicándole que le ayude, pasando los
siguientes días en compañía de Beth, lidiando con los insoportables síntomas de
abstinencia. Iniciando su recuperación, se disculpa con Jarvis, ofreciéndole de
regreso su trabajo. Éste acepta gustoso, pero revela que para costear los
tratamientos de su madre, tuvo que vender las acciones que Tony le regaló por
su aniversario laboral a un prestamista y no pude recuperarlas por estar
desempleado. Cambiándose a Iron Man, Tony confronta al prestamista, enterándose
muy tarde de que éstas ya fueron transferidas a SHIELD, convirtiendo
automáticamente a la organización en propietaria de la mayor parte de su
compañía (algo que estuvo intentando evitar desesperadamente). La impotencia
tienta a Tony a escaparse con la ayuda del alcohol, pero Beth y Jarvis le
advierten lo que eso le hará, dejándole decidir y superar esto por sí mismo.
Tony hace un esfuerzo supremo de voluntad para cerrar la botella sin probar ni
una gota, agradeciéndoles y motivándose
a luchar por recuperar su compañía.
- Para tratarse de un problema tan grave como es el alcoholismo, fue tratando en muy pocas páginas (aun si los síntomas ya llevaban rato mostrándose en números previos, pero sin graves consecuencias, girando casi todo en torno al sabotaje de Hammer). Claro que no significa que Tony no reincidiría ni seguiría sufriendo por esto durante los siguientes años, siendo este apenas el comienzo, sin dejar de ser un episodio memorable donde muy poco bastó para mostrarlo desmoronándose (y poniéndose de pie casi enseguida).
Días del Futuro Pasado
(1981)
Uncanny X-Men #141 (Días del
futuro pasado): Una versión futura de Kitty Pryde intercambia su mente con
su contraparte del presente para prevenir a los X sobre el asesinato político
perpetrado por la Brotherhood of Evil Mutants que ocasionará el predominio de
los Sentinels.
Uncanny X-Men #142 (¡Mente fuera
de tiempo!): Los X-Men se enfrentan a la Brotherhood of Evil Mutants por la
vida del senador Robert Kelly mientras sus contrapartes sobrevivientes del
futuro van siendo masacradas por los Sentinels.
El Guantelete Infinito
(1991)
The Infinity Gauntlet #1 (Dios): Con
Mephisto como su sirviente, Thanos se jacta del poder que ha recibido gracias a
la obtención de las Gemas Infinitas contenidas en su guantelete, reunidas como
parte de una táctica en que la misma Muerte fue engañada cuando le puso la
encomienda de matar a la mitad de seres vivos del universo como una prueba de
su amor. Silver Surfer irrumpe en el sanctum sanctorum de
Doctor Strange para alertarle del peligro universal que Thanos representa. La
Muerte desprecia a Thanos por haberla manipulado, desdeñando todos sus intentos
por congraciarse con ella, desde construirle un monumento hasta la “obra” en
que transforma a su supuesta nieta, Nebula, atrapada en un estado entre la vida
y la muerte. No viendo otra opción, Thanos cumple su palabra, chasqueando los
dedos para automáticamente borrar a la mitad de los habitantes del universo. En
la Tierra, Spidey, Cap y Hulk ven desaparecer a compañeros y seres queridos, de
igual modo en que Surfer y Strange contemplan el mismo efecto en el sirviente
Wong. En el espacio, los Skrulls toman consideraciones (culpando a los Kree de
sus congéneres desaparecidos), mientras Starfox en compañía de Drax y Firelord,
ve esfumarse a su padre e inmediatamente asume que el responsable es Thanos.
Adam Warlock y sus compañeros, Pip y Gamora, viajan a la Tierra utilizando los
cuerpos de un trío de malvivientes, pero Gamora no tarda en acompañar a los
desaparecidos mientras Pip ve a Adam encerrarse en un capullo para completar su
transformación.
The Infinity Gauntlet #2 (¡De mal en peor!):
Las acciones de Thanos provocan una diversidad de crisis en la Tierra. Los
héroes, coordinados por Nick Fury, hacen lo que pueden para ayudar. Thanos
atrae a Starfox para obligarlo a fungir como testigo de su grandeza, borrándole
la boca para que no pueda ni hablar ni usar sus poderes. Los Kree no dejan
oportunidad de culpar a los Skrulls por los que han desaparecido entre los
suyos (que predecibles). Captain America establece una lista de los héroes
erradicados de la existencia ante sus compañeros Avengers y Odin convoca una
asamblea entre otras deidades para intervenir a su manera. Epoch envía a Quasar
al punto del conflicto, advirtiéndole esperar antes de hacer algo. Doom invade
el hogar de Strange, imponiendo su egolatría, cuando Adam Warlock y Pip se
presentan ante ellos. Thanos utiliza a Starfox y a Nebula como juguetes,
torturándolos para deleitar a la Muerte, pero ésta persiste en despreciarlo,
provocándole una rabieta que complica la situación de la Tierra y más allá,
afectando incluso a las deidades (que al final no hicieron nada). La casa de
Strange es afectada, pero él emplea sus poderes para proteger a sus ocupantes,
permaneciendo ilesos entre las ruinas.
The Infinity Gauntlet #3 (Preparaciones para la
guerra): Warlock explica lo que sucede a los demás héroes, reclutando a
todos los que estén dispuestos para enfrentarse directamente a Thanos. Doom no
está de acuerdo, pero a regañadientes, insiste en seguirlos. Con ayuda de
Surfer, Warlock se transporta hacia donde esperan Quasar y Epoch, convocando
una asamblea entre entidades cósmicas que incluyen a Watcher, Eternity, Kronos,
Lord Chaos y Master Order, Love y Hate, Stranger, Living Tribunal, Galactus y
representantes Celestials, esperando que se les unan (sólo Living Tribunal
declina mientras Watcher advierte que se limitará a observar). Los héroes
terminan de prepararse y finalmente Warlock los guía a la batalla definitiva.
Thanos crea a “Terraxia”, una contraparte femenina suya, para darle celos a la
Muerte, fallando en su propósito, antes de recibir a sus oponentes.
The Infinity Gauntlet #4 (Conflicto en el punto
más lejano de la galaxia): Thanos, con la asistencia de Terraxia, procede a
combatir a los héroes, pero antes toma el consejo de Mephisto, peleando con la
mitad de su poder para impresionar a la Muerte con su “valentía”. Comienzan a
caer uno por uno ante el poder superior de Thanos. Doom aprovecha una oportunidad
para robar el guantelete, pero Thanos se levanta demasiado pronto y ataca con
mayor severidad. Surfer aguarda con Warlock, inquietándose cuando éste admite
que los héroes no son más que peones de sacrificio en lo que se pone en marcha
su verdadero plan de ataque. La batalla termina, dejando sólo a Cap de pie.
Surfer intenta tomar a Thanos desprevenido para quitarle el guantelete,
fallando por un error de cálculo. Thanos vuelve a activar su poder al máximo y,
finalmente, Warlock manda a las entidades cósmicas para plantarle cara.
The Infinity Gauntlet #5 (Conflagración astral):
La batalla de Thanos contra las entidades cósmicas estalla con desastrosos
efectos que se presentan por todo el universo, poniendo en peligro a Warlock y
a Surfer. Muerte protege a Starfox y a Nebula hasta que ella misma se une a sus
oponentes, junto con el traicionero Mephisto. Thanos deja a todos neutralizados
y prosigue aceptando el desafío a Eternity, que no tarda en unirse a los
“trofeos cósmicos”. Thanos se jacta de su triunfo fundiendo su conciencia con
el universo, descuidando su cuerpo físico, lo que Nebula aprovecha para
apoderarse del guantelete, dejando al indefenso Thanos a la deriva del espacio
con Terraxia, quien muere inmediatamente ya que no fue diseñada para sobrevivir
en ese ambiente. Surfer y Warlock recogen a Thanos, volviendo con Strange,
guardando a sus refuerzos que incluyen a los resucitados Doom, Drax, Firelord,
Hulk y Thor. Thanos se rehúsa a ayudarles, pero Warlock lo confronta,
recordándole su reconocimiento sobre como al final él mismo siempre se ha
derrotado a nivel subconsciente, indicando que en el fondo trata de hacer lo
correcto. Nebula se regocija con su nuevo poder cuando es atacada por los
refuerzos, encarando después a Thanos, Surfer, Warlock y a Strange, listos para
terminar con todo.
The Infinity Gauntlet #6 (La confrontación
final): Irritada ante el desafío, Nebula procede a demostrar como domina su
nuevo poder, regresando todo a la normalidad 24 horas antes, reviviendo
automáticamente a los que murieron y reparando los daños universales.
Igualmente revierte al estado en que Thanos la dejó, pero se recupera antes de
que él pueda reclamar el guantelete, enfrentando a las entidades cósmicas
liberadas. Warlock transporta a Surfer al mundo dentro de la Gema del Alma,
fundiéndose con la escancia para extender sus poderes y desde ahí controlar el
poder de las otras gemas. Nebula congela a las entidades, pero el efecto de
Warlock la obliga a quitarse el guantelete. Thanos se precipita para tomarlo de
nuevo, pero los refuerzos regresan, sometiéndolo tanto a él como a Nebula en lo
que Warlock lo recoge, declarándose su dueño absoluto. Thanos se niega a vivir
sin ese poder y aparentemente se suicida, detonando una bomba oculta dentro de
su traje. Warlock envía a los demás a su lugar de origen, con Nebula
prisionera, dejando sólo a Strange, Thor y Surfer, quienes lo cuestionan sobre
si en verdad podrá conservar ese poder sin corromperse. Las respuestas de
Warlock son vagas y acaba por devolverlos, reuniéndose con Pip y Gamora,
viajando rumbo a un planeta pacifico sin nombre. Ahí, reencuentran a Thanos,
que fingió su muerte para retirarse a una vida tranquila. Satisfecho, Warlock
lo deja ser, mientras Thanos reflexiona en solitario sobre la carga que su viejo
amigo/enemigo tendrá que soportar a partir de ahora.
- Incluye galería de las portadas originales y un apartado especial con las fotos y nombres de los lectores que participaron para votar por la publicación de estas clásicas epopeyas de Marvel.
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