Simpson Comics: Parte Ocho
La revista sigue adelante con su nuevo formato presentando historias secundarias sin lado flip ni portada propia (aunque a veces desplazan la historia para notas o material extra de lo que se les ocurría).
El tercer especial de Halloween es presentado sin muchas ceremonias (en realidad es a partir del cuarto cuando empiezan a ponerse realmente interesantes e innovadores, por no decir perturbadores) pero inesperadamente.
El entusiasmo de Vid comienza a decaer conforme van dejando de lado la sección de Correo Chatarra, desperdiciando valioso espacio en las otras casi irrelevantes. The Bongo Beat es la única recurrente que tendría cierta importancia por hablar de las novedades (aunque de manera tardia) de lo relacionado con Los Simpsons.
Simpson Comics #43 (Simpsons Comics #28): Durante una junta para presentar la asquerosa “Krusty-Burger de Lujo”, Krusty es informado del próximo pago de impuestos, mostrandose renuente a efectuarlo, mandando traer a Bart para ayudarle a desligarse de esa responsabilidad (con base a la ocasión en que éste expuso accidentalmente lo de su cuenta bancaria ilegal en el Episodio 143). Bart se queja con Milhouse sobre los centavos que se queda el gobierno en cada producto que compran (influido por la tediosa película que les presentaron de Troy McClure cuyo único fin era darle publicidad a una marca de té) cuando la gente de Krusty se lo lleva para consultarle el problema. Bart sugiere que Krusty funde su propio país para quedar exento de pagar impuestos y de inmediato se pone a trabajar en la publicidad para invitar a los habitantes de Springfield (con carteles al estilo de Tio Sam) a renunciar a su ciudadanía y trasladarse a su propiedad, convertida en “Krustonia (aunque luego él mismo confunda el nombre con “Krustylvania”). El payaso contaba con atraer a un par de personas pero acaba recibiendo a más de veinte (entre las que por supuesto, incluyen a los Simpsons, cada quien atraído por su propio interés, excepto por Marge que tiene dudas pero no la toman en cuenta). Sobreponiéndose con ayuda de Bart, Krusty se activa para iniciar con las transmisiones en vivo desde Krustonia, asumiendo su posición de rey, manteniendo a sus súbditos alimentados con coles y salamis (e incluso realizando el número del Rey Salomón cuando Barney y Homero se disputaban un salami, lo que Lisa reconoce como acto de un sabio monarca pero sòlo fue una puntada). El tiempo pasa y las desavenencias comienzan cuando los subditos inconformes como el padre de Milhouse se quejan de que Krusty no ha cumplido todas sus promesas, siendo suprimidos rápidamente.
El Jefe Gorgori y sus hombres son puestos a cargo pero son relevados por un agente federal que corta la luz (problema que Krusty resuelve poniendo a otros que se atrevieron a cuestionarlo a proporcionar energía a través de bicicletas estáticas de Frink). Las cosas empeoran cuando Skinner vuelve a su papel de sargento, dirigiendo a un pelotòn con el fin de recuperar un libro de la biblioteca que estaba en posesión de Lisa, y la rebelión desatada por la misma Lisa luego de comprobar que los salamis con que los alimentaban estaban hechos de carne de rana. Krustonia se derrumba y Krusty escapa, no queriendo saber nada de lo que filmó Mel Patiño sobre todo el proceso (que al final presenta como un exitoso documental).
Flanders marca un tanto: El dinero de la iglesia es robado y Flanders, tras haber pasado un curso de detective, es puesto en el caso (asegurando que Gorgori no lo acuse de interferir, sobornándolo con rosquillas). Interroga a los sospechosos con métodos sutiles (como mojar a Barney con agua pura) cuando es victima de un atentado desde un coche. Identifica la placa para dar con sus dueñas, Paty y Selma, pero ellas aclaran que se los habían robado, y Flanders tiene que solicitar acceso a las cámaras de seguridad del Kwik-E-Mart (tras amenazar a Apu con denunciarlo con el inspector de salubridad) comprobando que el conductor era una monja. Siguiendo las pistas, Flanders descubre que la “monja” es el Reverendo Alegría disfrazado e hipnotizado, que usaba el dinero para jugarlo en apuestas.
Recordando que la tendencia de Herman de participar en negocios ilícitos y el hecho de haberlo visto interesado en un equipo de hipnosis, Flanders le manda a la policía y recupera el dinero (aunque Herman acaba usando la hipnosis para que Gorgori lo suelte).
Contenido extra, curiosidades e irregularidades:
• Galería Chatarra.
• The Bongo Beat; Juan Miguel Iceman García D. nos cuenta todo el proceso que conlleva la producción de los episodios de la serie (cada uno toma seis meses).
• Simpsecretos (ahora anuncian que publicaran los planos de la casa de los Simpsons pero nunca lo hicieron).
• Intercambio Amarillo.
• Aunque en el #3 se refirieron a la asistente de Krusty por su nombre original (Srita. Pennycandy), aquí la volvieron a dejar como la doblaron en su única aparición en la serie en el Episodio 41 (“Srita. Monina”).
Referencias sobre celebridades, cómics, películas, etcétera:
• Nescatè, LaRouche, John Locke, Appomatox, Columbo.
Simpson Comics #44 (Simpsons Comics #29): Homero se queda despierto toda la noche cocinando compulsivamente, influido por la televisión de madrugada, y Marge lo castiga ordenándole quedarse en casa mientras ella y los niños van a cenar con Paty y Selma al día siguiente (lo que Homero toma como una oportunidad para escaparse e irse a atiborrarse de comida en otro lado). Smithers informa a Burns de uno de sus negocios de menor importancia (que apenas aporta ganancias de tres millones al año) al promocionar al Capitán Sacudida, un popular profesional de la lucha libre, pero éste se presenta para renunciar, a una hora de su más próximo combate en el restaurante de McCallister. Burns, rehusándose a devolver el dinero de las entradas, ordena a Smithers encontrar un sustituto improvisado, y por supuesto que eligen a Homero (aprobado por Burns después de verlo lucir sus “proezas de lucha” para arrebatarle a Barney el ultimo langostino frito del buffet de mariscos, ignorando las protestas de Smithers al señalar sus constantes roces en el pasado). Con un argumento convincente (y enredado), Smithers disuade a Homero para ponerse el traje y emocionar al público, siguiéndole la lucha contra el Peregrino Castigador. Al no haber sido enterado de que la pelea está arreglada, Homero intenta huir de su contrincante, cayéndole encima accidentalmente al subirse en las cuerdas. Viendo que nadie se percató del cambio y la popularidad del luchador ha aumentado, Smithers y Burns deciden seguirlo utilizando (Homero ni se entera por su lentitud al captar las indirectas del engaño hacia el publico, creyendo que Burns confía en su propia capacidad).
Homero intenta informar a la familia y sus amigos sobre su nueva profesión pero nadie cree que él sea el Capitán Sacudida, siguiendo con la racha de combates arreglados donde poco a poco agarra confianza, convencido de que derrota a sus contrincantes con sus propias fuerzas. Burns disfruta de las ganancias y permite que Homero descanse de su trabajo durante una semana para prepararse para su última lucha del campeonato, haciendo que éste se lo tome más en serio y le pida ayuda a Barney para entrenar (pero acaban pasándosela perdiendo el tiempo en otras cosas). Llega la noche de la gran pelea contra William, el Vikingo, y durante el forcejeo, se rompe el traje para revelar la ropa interior de Homero (con su nombre escrito, captado por un close up de la cámara desde el televisor de la familia Simpson). El Vikingo anuncia su próximo movimiento para que Homero lo esquive, justo cuando éste se distrae con la aparición de Marge y los niños, cayendo al recibir el golpe en la cara. Meses después, se revela que Burns salvó la situación cambiando los muñecos que iban a vender del Capitán Sacudida con los “Aporreame Homero” que tienen un chip barato de sonido que reacciona los golpes en el estomago, volviéndose un éxito de mercadeo (que ni el mismo Burns se resiste a darle un puñetazo para sacarle un “¡Ouh!”).
Echando abajo al bebe: Los Simpsons andan de picnic y Maggie se reencuentra con su némesis, el bebe de una sola ceja. Nelson roba unos globos y se los deja al mocoso, mandándolo a volar.
Maggie se trapa en la cometa de Bart para alcanzarlo, callando sus lloriqueos al ponerle su chupón extra en la boca, procediendo con el uso un pájaro que iba pasando para descender en lo que emplea el alfiler de su pañal para ir rompiendo los globos. Ambos quedan a salvo pero siguen mirándose con resentimiento.
Contenido extra, curiosidades e irregularidades:
• Intercambio Amarillo.
• Galería Chatarra.
• The Bongo Beat; Sergio El Barto Robledo G. informa sobre la muerte de Phil Hartman, el actor que daba las voces de Lionel Hutz y Troy McClure (por lo que son eliminados de la serie animada, en el cómic no hacen exactamente lo mismo pero limitan considerablemente sus apariciones al grado de que màs adelante ni notamos en que momento dejan de usarlos por completo) y habla sobre lo que viene para la decima temporada cuyo estreno estaba próximo.
• Justo en este número, el mismo Burns menciona la muerte de Phil Hartman.
• En realidad, Homero no fue vencido en el combate diciendo su característico “¡Ouh!” ya que le pegaron en plena cara (aunque los de Vid lo dejan como “¡Auch!”), por lo que no tiene sentido que le pongan a decir eso al muñeco. ¿Y como puede el mismo Burns golpearlo para producir el efecto si en varias ocasiones hemos visto que es demasiado débil y decrepito como para realizar tal proeza? Un misterio.
Referencias sobre celebridades, cómics, películas, etcétera:
• Ted Asner, Miles Standish, Jamie Farr, Tyson-Seldon.
Simpson Comics #45 (Simpsons Comics #30): Ante la protesta de sus empleados por un aumento de cinco centavos, Burns deja a Springfield sin electricidad (orillando a Kent Brockman a dar las noticias yendo de casa en casa) pero ante su resistencia termina por irse por otra iniciativa: clonar a un empleado modelo (Smithers) para surtir un personal capacitado (pese a que le sale mucho màs caro que ceder ante sus demandas). Homero comparte la mala noticia con la familia y Bart se avispa, ambicionando tener sus propios clones que lo suplan para que realicen sus tareas mientras él haraganea. La planta nuclear es operada por los Smithers, cuyo defecto es el pelearse constantemente para acaparar la atención de Burns. Celosos del Smithers original, se disponen a matarlo, persiguiéndolo en lo que Bart, haciéndose pasar por reportero, se mete en la planta. Smithers escapa tomando el lugar de uno de los clones y acude a la policía, justo cuando Homero reportaba la desaparición de Bart. Gorgori no toma en serio a ninguno de los dos (ni al Abuelo que también andaba ahí, esperando desde 1968 para reportar los daños de su vehículo, fechoría que secretamente cometió Homero) pero Smithers convence a Homero de ayudarlo al informarle sobre la situación de Bart. Visitan a Sinclair para que disfrace a Homero del Sr. Burns y así regresar a la planta pero el apetito de Homero por las rosquillas (comiendo por accidente la prótesis que le servía de nariz) echa el plan a perder. Piden ayuda entre la clientela de la taberna de Moe pero nadie quiere mover un dedo por Burns ni por Bart mas terminan acompañándolos ya que el barril quedó vacio. Vistiendo camisetas floreadas y al ritmo de la conga, se abren paso en las instalaciones y se enfrentan a los Smithers, mas estos los someten con sus habilidades de combate (desarrollados por ver las películas de Van Damme). Bart es descubierto y encerrado en una fachada de guardería, robándose una muñeca Stacy Malibu de edición especial para distraer a los clones justo cuando intentaban obtener sangre de Burns para clonarlo (al no poder sacarle nada con la jeringa, su ultima opción era cortarle un brazo).
Homero, Bart y Smithers coinciden en la oficina de Burns, aparentemente quedando a merced de los clones, pero Smithers amenaza con destruir la muñeca y los obliga a meterse en la bóveda para encerrarlos. Smithers aboga por la vida de sus clones ante Burns y Sinclair tiene la idea de utilizarlos para un musical en Broadway con ellos, aportando más ganancias para dejar satisfecho a Burns y aceptar dar el ridículo aumento.
Aburrámonos con la película pesada: Bart y Milhouse asisten entusiasmados al cine para ver la exhibición de la edición especial de Mutantes Espaciales pero por una metida de pata la cinta no llegó y en su lugar pasan el clásico de Troy McClure, Gladys, la mula alegre. A Bart y a Milhouse no les queda de otra que ver la alocada película de las desventuras de un nerd que recibe consejos de una mula parlante con actitud para lucirse como la estrella en un partido de football, y luego acabar con los bravucones que lo molestaban (interpretados por Wolfcastle y Moe) al ponerlos a trabajar en la supervisión de detonaciones que hace para los militares, liquidándolos con su “bomba corpiño”.
Contenido extra, curiosidades e irregularidades:
• Galería Chatarra.
• Intercambio Amarillo.
• The Bongo Beat; Juan Miguel Iceman García D. reporta la renuncia de Marina Huerta para seguir doblando al personaje de Bart debido a problemas con su contrato (y como hemos visto, reemplazarla no fue tan difícil, así que no fue para tanto).
• En parte, Bart consigue el acceso a la planta al mencionar que donó sangre a Burns, otro suceso que recordaremos del episodio 35 la serie televisiva.
• Llewellyn Sinclair, el excéntrico director de teatro, es un personaje de una sola aparición en la serie pero aquí en el cómic lo seguiremos viendo en algunas ocasiones.
Referencias sobre celebridades, cómics, películas, etcétera:
• Gregorio Mendel, Aldous Huxley, Kubrick, Gloria Stefan, Oliver North, Mr. Smith va a Washington, Edward Teller, Vince Lombardi, Khrushchev, Richard Nixon.
• El logotipo de Burns Labs es semejante al de Jurassic Park.
• Homero hace un chiste indirecto después de quejarse de las imitaciones de productos originales, mencionando las de marcas Eggie-Weggers, Nearly Beacon y Mister Orangey (puras imitaciones típicas).
• La obra musical que montan los Smithers parodia la letra de la canción Hello Dolly.
• Pese a que no tiene nada que ver, el elenco de la película de McClure parece hacer una parodia de los personajes en Amazing Fantasy #15 (sobretodo en la primera escena que es una reproducciòn precisa del primer panel) y el mismo nombre del protagonista semeja al de Peter Parker.
Simpson Comics #46 (Simpsons Comics #31): Homero y Marge asisten a un baile de disfraces (como Hombre Radioactivo y Mujer Comadreja, respectivamente) pese a que Homero no está contento ya que quería ir como un pastel cremoso (aumentando su enojo cuando el premio del mejor disfraz lo gana la madre de Milhouse que iba de mujerzuela, descrita por el atrevido alcalde como un “rico pastelito”). El Dr. Colossus irrumpe para robar los fondos recaudados pero al hallar la salida “bloqueda” (aunque Lou y Eddie sólo estaban descansando, como siempre), tiene que mezclarse entre los asistentes. Homero lo confunde con Burns y Colossus intenta disimular, creyendo que a pesar de todo ha sido descubierto. Accidentalmente, Homero activa las botas de Colossus, enviándolo para recibir una descarga eléctrica en el techo, dejando caer su maletín sobre los bocadillos que estaba juntando. Irritando (y todavía creyendo que se trata de Burns), Homero se prende a las botas y la sacudida lo manda contra la pared, perdiendo la consciencia. De vuelta a casa, es atendido por el Dr. Hibbert y al despertar, queda claro que es victima de amnesia. Marge y Hibbert lo dejan solo un momento y Homero descubre una nota en el periódico donde informan como el “Hombre Radioactivo” derrotó a Colossus, llegando a la única deducción lógica (tras desechar la teoría de que estaba disfrazado en un baile, considerándolo algo que sólo a un escritor de cómics baratos se le ocurriría): él es el Hombre Radiactivo. Marge informa a la policía y el Jefe Gorgori interpreta la descripción a su manera (imaginando a Homero transformado en un monstruo radiactivo que escupe fuego atómico) y envía a Eddie y a Lou para someterlo. No tardan en encontrarlo y lo dejan en el asilo psiquiátrico más cercano. Al reportarlo con Marge, ella se indigna pero tiene otros problemas entre manos después de haber vaciado la cuenta para traer al Abuelo desde El Salvador (donde quedó varado por accidente al quedarse dormido durante un recorrido, todo esto sucede fuera de escena) y solicita su antiguo trabajo en la planta nuclear. Smithers sólo puede ofrecerle el trabajo de su esposo, dándole una grabación para que sepa que hacer (nada más que tomar la siesta y dejar que un pato se encargue de todo). En el asilo, Homero reencuentra (aunque en su estado no reconoce) a Leon, que ha regresado por la nostalgia, trabajando como empleado de limpieza. Homero le pide que le ayude a escapar y Leon accede a cambio de permitirle fingir como su compañero el Chico Residuo Nuclear. Mientras, en la planta nuclear, Frink y Olberman ponen sobre aviso a Smithers del escape del Proyecto Q (mencionado por primera vez en el #1), ordenando la evacuación inmediata de la planta. El disturbio es cubierto por Brockman (aunque a falta de información, éste supone que Nixon es responsable de la crisis), reportando que Marge y los dos científicos siguen adentro. Homero y Leon disponen de los guardias y escapan (la puerta estaba abierta todo el tiempo, marcada para que la usen sólo los cuerdos) para salvar el día. El Proyecto Q (una araña cibernética cuya función era asegurar la inmortalidad de Burns al fusionar su cerebro con sus componentes pero acabó desarrollando personalidad propia, ambicionando la destrucciòn y tuvieron que tenerlo contenido desde entonces) se apodera de los científicos y agarra a Marge.
Homero y Leon se las arreglan para entrar pero Leon no tarda en ser derribado por los rayos oculares del Proyecto Q. Homero cae encima de la cabeza del monstruo, y adopta sus patrones cerebrales, cambiando su modalidad de destructiva a devoradora de rosquillas. Frink y Olberman lo contienen nuevamente y liberan a Homero, recuperando la memoria para alivio de Marge (aunque el golpe que se dio parece haber provocado que Leon se crea Bart Simpson, surgiendo una nueva complicaciòn).
Contenido extra, curiosidades e irregularidades:
• Intercambio Amarillo.
• Galería Chatarra.
• Simpsecretos.
• Guía oficial de Bongo: Convención de cómics (Manual de supervivencia); sección extra donde Bart analiza lo que podemos encontrar en una convención, entre los diversos tipos de fans, los ridículos disfrazados, los pros y contras de los artistas (clasificados en el principiante, el viejo profesional y la estrella), el significado de los criterios con que calificaban las presentaciones de trabajos, y otras cosas.
• En el baile de disfraces, dibujan a Smithers dos veces (en una vestido como Marilyn Monroe y otro como pirata). Lo extraño es que lo hagan en la misma página.
• En el ultimo panel de la pàgina 22, Marge imita el “¡Ouh!” de Homero pero lo escribieron como “¡Ouch!”
• El Dr. Colossus es un personaje de contadísimas apariciones en la serie animada pero en el cómic es un poquito más constante. En contraste, a Leon, otro personaje de una sola aparición en la serie, no lo veremos mucho más.
Referencias sobre celebridades, cómics, películas, etcétera:
• En el baile de disfraces, se aprecia a los ciudadanos de Springfield disfrazados de varios personajes populares de los que siempre hallamos en las fiestas hasta los que son raros (como Frink disfrazado de Spawn) pero también de los mismos personajes relacionados (el más curioso sería Otto, que va como Bongo, la creación previa de Matt Groening en Life in Hell).
• Cristina, Richard Nixon.
Simpson Comics #47 (Simpsons Comics #32): Para mantener la cafetería McBeans, Krusty, McClure y Wolfscastle prueban de todo, desde el karaoke hasta comedia alternativa, degenerando en un casino hasta que son obligados a suspender por el grupo del Reverendo Alegría. Lisa intenta organizar un club de poesía con Martin pero terminan siendo los únicos miembros y pierden su centro de reuniones en la biblioteca. Van a McBeans donde la pedantería de Martin exaspera a Lisa, rechazando sus burdos intentos de abordarla, orillándolo a marcharse. Krusty considera el potencial de la poesía (y más al enterarlo Lisa de que los poetas no cobran ya que lo único que quieren es ser escuchados) como una nueva innovación en la cafetería, invitando a Lisa a participar. En la noche de la inauguración del rincón poético, Apu comienza con un extraño poema (que sólo comprende Lisa) y ella prosigue con el suyo (lleno de sutiles referencias sobre su familia). Martin se presenta y entabla un improvisado duelo poético con Lisa, intercambiando sofisticados e ingeniosos insultos. Krusty ordena a Wolfscastle que lo eche a patadas (luego de que casi revela como preparan su asqueroso café) y acaba entrando en el bar de Moe, quien también anda considerando explotar la poesía, contratándolo enseguida. Lisa se indigna cuando Krusty pretende usarla para entablarse en más duelos poéticos y se topa con Martin, iniciando otra discusión donde se dan (verbalmente) con todo.
Moe y Krusty los interrumpen, percatándose de la multitud que han atraído (y que están desperdiciando tanto material al hacerlo gratis) y hacen los arreglos para un encuentro formal en el centro cívico de Springfield. Con Skinner como mediador, Lisa y Martin intercambian una nueve serie de insultos poéticos en los que el segundo parece llevar las de perder. Martin deja la agresividad al salir con un poema que alaba las cualidades de Lisa y expresa su conformidad al no ser correspondido en sus sentimientos, conmoviéndola y logrando que vuelvan a ser amigos de nuevo. El resto de la familia Simpson concluye que ahí acabó la moda de la poesía y que podría seguirle cualquier cosa (comprobándolo algún tiempo después, con Krusty y Moe promoviendo otro tipo de entretenimiento radical que consiste en una extraña rutina cómica de Milhouse).
¡Los Bongos olvidados por el tiempo! Una serie de notas sobre títulos en los incursionara la editorial, puros experimentos fallidos (que claro, nunca fueron publicados y sòlo intentan hacer de ingeniosas parodias) .
¡La fe es algo divertido! Una serie de cómics de temática religiosa que imitaban el estilo de cierto programa religioso infantil, siendo desbancado por títulos como Monseñor Manatee.
El Abuelo Octogenario: Un titulo dedicado a los ancianos que fracasó precisamente porque esa es una generación que cree que los cómics son una perdida de tiempo.
La Guarida del Pavor: Parodiando a Tales from the Crypt y Vault of Horror, este titulo de historias truculentas fue cancelado por su contenido controversial (una escena de Paty y Selma usando crema depiladora facial).
¡El Sombrero del Hombre Abejorro lleno de Snickers! Un pésimo intento de hacer una revista de actividades para niños.
El Pequeño Ayudante de Santa Claus: Un número uno que nunca salió a la venta debido a que su contenido implicaba la energía nuclear y cada intento de lanzarlo coincidía con desastres tales como el de Chernóbil, por lo que se le consideraba un cómic tipo “Nostradamus”.
Clásicos Simplificados: Una mala idea para poner a los personajes conocidos representando obras literarias suprimidas por el Departamento de Educación.
Los amigos y las amigas de Burnsie: Parodia descarada de los cómics de Archie con un reparto poco convincente, rompe el record de tener más ediciones devueltas que vendidas.
Moe, el último soltero de Springfield: Intento de darle el protagonismo a Moe en un mundo postapocaliptico en que es el último hombre que sigue vivo sobre la Tierra con pésimas tramas argumentales que degeneran en su inminente cancelación.
Contenido extra, curiosidades e irregularidades:
• The Bongo Beat: MECYF 98 ¡Un evento “Simpasional”! Sergio El Barto Robledo G. extiende el espacio de esta sección para dar un reporte de lo acontecido en el evento, con fotos de los actores de doblaje de la serie y su participación durante el mismo.
• Galería Chatarra.
• Van optando por “traducir” el apellido de Barney Gumble (al “Gómez” del doblaje mexicano). Con Martin parece que no se deciden ya que en este mismo número su apellido oscila entre “Prince” y “Príncipe”. También olvidaron su iniciativa de “Abejorro Cotorro”, dejando a ese estereotipado personaje con su traducción normal de Hombre Abejorro.
Referencias sobre celebridades, cómics, películas, etcétera:
• Jimmy Caan, Devo, Kaja Googoo, Red Hot Chili Peppers, Christian Slater, Harry Connick Jr., Wilfred Brimley, Robert Overkirk, David y Goliat, Marcel Proust, Charles Dickens, Leo Tolstoi, Nathaniel Hawthorne, Walt Whitman, Garcia Lorca, Wallace Stevens, D. T. Lawrence, Groucho Marx, Allen Ginsberg, Ruth Bader Ginsburg, W. B. Rottner, William Wordsworth, P. B. Shelley.
Simpson Comics #48 (Bart Simpson’s Treehouse of Horror #3):
¡La inmigración de los profanadores de cuerpos! Homero es tomado por loco, gritando sobre una invasión extraterrestre y es llevado ante el Dr. Monroe para exponer su caso. Entusiasmándose, Homero inicia la retrospectiva (luego de equivocarse con la primera escena donde ya se andaba viendo en un Rumania, a bordo de un carruaje tirado por un jorobado en una noche tormentosa) en lo que parecía un día normal de frustraciones, encontrándose con la ciudad demasiado tranquila y apagada. Barney lo llama para presentarle una irregularidad en su jardín con la forma de una vaina gigante que contiene una replica de si mismo y Homero deduce que es parte de una invasión para reemplazar a la gente mientras duermen (aunque admite que sólo es una suposición). Se les ocurre interrogar a la gente que encuentran por la calle (incordiando a Smithers, Krabappel y a francés, que suponían que los acusaban de ser otra cosa al usar el termino “vaina”) hasta que Luigi les revela el plan de los suyos para sumir al universo en eterna pasividad. Barney se duerme mientras Luigi habla y es reemplazado por su yo vaina, llevándose a Homero al bar de Moe (donde ahora sólo venden agua tibia) para disuadirlo de aceptar su nueva vida.
Una vez que le aclaran que ser vaina significa que ya no podrá disfrutar de las cosas que le gustan (cerveza, rosquillas, lucha libre, y la familia, de acuerdo al orden de importancia que les da Homero) prefiere resistirse y escapar, regresando a la casa, donde Bart y Lisa ya han sido convertidos en vainas (viendo un aburrido episodio de Itchy & Scratchy en el que se la pasan viendo como se seca la pintura, indicando como la invasión ya se ha apoderado del programa de Krusty). Como los niños intentan hacer que se duerma (ofreciendole leche caliente y hablando de la aburrida politica de Quebec), Homero va comprendiendo lo que les pasó y expone su estado ante Marge, quien los suponìa normales hasta que entra en consciencia lo bien portados que se han mostrado repentinamente, entrando en pánico al caerle que, en efecto, son vainas especiales. La pareja corre al Kwik-E-Mart por provisiones, fingiendo ser vainas, pero Homero la riega al atiborrarse de rosquillas y tienen que echar a correr. Los pierden al esconderse en una mina pero Marge se duerme y se incorpora a los enemigos. Homero sigue corriendo (luego de saludir a un tipo de Shelbyville que a su vez andaba huyendo de zombis) y alcanza la carretera, justo cuando acontecía una convención de periodistas chiflados, dispuesto a denunciar la invasión. El autobús de Otto lo golpea y lo deja para la policía que lleva a Homero directo al asilo en lo que distribuyen màs vainas.
Homero espera que le crean al tener enfrente las evidencias cuando tiene lugar una serie de locos giros y revelaciones, resultando en que el mismo Monroe es un venusiano, y los policías que lo trajeron son, respectivamente, una pareja de marcianos y un clon robot fantasma del futuro. Willie anuncia que la gente esta siendo convertida en escocesas debido a un tipo de crema de vainilla y varios personajes (familiares) irrumpen cada uno con su propia loca crisis y/o teoría. El último es Bob Patiño, rompiendo el cuarto muto al exhibir la realidad en la que viven como personajes de cómic, y todo se vuelve un desastre.
Recepción fatal: Homero alude a una antigua tradición inventada que le permite quedarse con la mitad de los dulces que sus hijos recolectaron en la noche de Halloween. Al disponerse a ver televisión mientras devora los dulces, la pantalla muestra una rosca siendo destrozada por un hacha, una caja de puros huesos de pollo Coronel Krusty, y el contenido de una Duff vertido en el desagüe. Homero llama a Frink para que investigue de donde proviene la señal que pasa esas imágenes y al informarle que sale de la misma casa, huye despavorido (ignorando que todo fue planeado por Bart, Lisa y Maggie para recuperar sus dulces).
Contenido extra, curiosidades e irregularidades:
• Galería Chatarra.
• The Bongo Beat; Sergio El Barto Robledo García nos habla del realizador de la historia principal en esta ocasión, Evan Dorkin (autor de la historieta Milk and Cheese), además de indicar sobre los personajes fugaces que aparecen a lo largo de la misma, y darnos actualización sobre la página en internet. También incluye una nota con preámbulos de lo que encontraremos en el siguiente número (el cual demoró bastante en ser publicado, siendo esta la primera suspensión temporal que sufriría la revista).
• Los personajes fugaces que aparecen en la reviste corresponden a los que han salido en un solo episodio de la serie televisiva (entre los que encuentran el creador original de Itchy, el padre de Kearny, la dueña del cabaret, entre otros). Algunos volverán a ser vistos en el cómic (sobretodo John, el dueño de la tienda de chucherías nostálgicas, que se incorpora a los más o menos regulares).
Referencias sobre celebridades, cómics, películas, etcétera:
• La historia principal toma bases de Invasion of the Body Snatchers, aunque hace alusión de temáticas de películas de zombis, Planet of the Apes, Back to the Future, Dracula, Soilent Green y Terminator.
• La historia secundaria se basa en una conocida leyenda urbana (que fue contada en el primer especial de Halloween de la serie televisiva).
• Charlton Heston, Cesarin Costra, Hard Copy, Haraganes de la bahía, Pimbo, El Canal de las Centellas, Familia Telerín, Chafez-De la Cacerola.
No hay comentarios:
Publicar un comentario