Uff… ¡y seguimos con esto!

Las aventuras de Uff #8 

Amor fantástico. 

Dos chicas, Lety y Lola, pasan el día en la playa practicando el surfeo (y hablando de chicos y los chicos de Uff, caro). Lety sufre una caída y casi se ahoga, perdiendo momentáneamente la conciencia, despertando con la resucitación boca a boca que le hace Fabio, rodeado por el resto de los babosos de Uff que andaban haciendo un videoclip por ahí por mera coincidencia. Aceptan dejar que las chicas observen la filmación pero el efecto de la presencia de Lety, provoca que Fabio se distraiga y entorpezca sus movimientos.

Manolo se percata de eso y les pide que se vayan pero Fabio las alcanza para invitarlas a la próxima filmación en una isla. Las chicas disimulan su entusiasmo y al día siguiente ya andan agasajándose con los de Uff en su yate, Britanic. Lola disfruta de las atenciones de los otros cinco mientras sigue desarrollándose el romance entre Lety y Fabio (que aburrido, apenas si intercambian palabras). Manolo los filma en comprometedora escena (y a ellos no parece molestarles luego de que Lety de el primer paso y le plante tremendo beso al otro), perdiéndose en la pasión.

En la isla, Manolo sigue filmando y las chicas se unen a los de Uff para una escena cuando son interrumpidos por la aparición de un pequeño león marino herido. Los chicos se comprometen a ayudarlo pero se muestran algo renuentes a acercarse debido a su ferocidad justificada (yo también me molestaría luego de haberlos oído cantar esas pésimas letras).

Contenido extra: 

• Pensando en Uff; más cartillas cursis con mensajes dedicados a tales miembros de la banda. 

• Clubes de fans Uff; datos y notas presentados por los distintos clubes (incluyen una fotografía con Manolo, el manager, cuyo verdadero ser difiere mucho a como lo pintan estéticamente en el cómic). 

• Uffotomania; ahora si ponen demasiados fotos tomadas en distintas de sus presentaciones. 

• Ofrecen una promoción de 500 fotografías en modalidad de “súper postales de Uff” (barf, si al menos no los maquillaran tanto y sonrieran menos, valdría la pena tener fotos de estos pelmazos). 

• Siguen invitando a adivinar como será el nuevo miembro de Uff, presentando la descripción imaginada por una lectura sobre su personalidad y apariencia (más o menos le atinó). 

Las aventuras de Uff #9 

Romance a 1000 X Uff. 

Para poder acercarse al animal herido, a los de Uff se les ocurre aventarle unas sardinas y esto basta para que se amigue con ellos, y hasta entonces reparan que la razón de su enojo era el dardo que tenia clavado (¿no lo habían señalado ya en el número anterior?) y deciden trasladarlo al yate para llevarlo a la isla donde pertenece. A bordo, Fabio sigue clavado en Lety y no disimula nada ante sus compañeros, declarándose sus sentimientos pero el arribo a la isla echa a perder el ambiente. En la isla, encuentran a un par de cazadores furtivos capturando al resto de las focas y deciden enfrentarse a ellos, utilizando sus habilidades para el futbol (que extraña estrategia).

Logran someterlos y llamar a las autoridades para que se los lleven, recibiendo felicitaciones de su parte. Acontece el ocaso en la playa y Fabio anuncia a Lety sus intenciones de dejar la banda para estar con ella, a lo que ésta replica que en realidad ya tiene novio. Aunque se decepciona, el chico no lo toma a mal y acepta seguir siendo su amigo (no volverán a verse). Al día siguiente, los de Uff abordan el avión y las chicas los despiden. Lety le cuenta a Lola lo que pasó, indicando que le dijo una mentira para que no abandonara al grupo, demostrando ser una fanática de corazón (mensa, lo hubiera salvado de la vergüenza que sigue luego de que se acaba la efímera época de gloria de este tipo de bandas). En el avión, Fabio sigue afectado pero se reanima con los demás firmando autógrafos. Algún tiempo después, Lety y Lola ven por televisión el videoclip de Uff en la playa, incluyendo las escenas donde ellas salen y el beso entre Lety y Fabio, dejándoles algo que presumir.

Contenido extra: 

• Uff en Six Flags; información sobre la reciente presentación donde los acompaña el nuevo integrante, Luis Fernando, contando algunas cosas sobre él y lo bien que ha sido recibido. 

• Clubes Uff; siguen con los datos de los distintos clubes. 

• Uffotomania; más fotos que las fans tomaron y se tomaron con los de Uff. 

• Pensando en Uff; más cartas cursis de chicas lanzadas (una inclusive pone su número de celular, y hasta el de su casa, para que Fabio le eche una llamada, pero yo siento que esto es una invitación a que le hagan una broma muy cruel o algo peor). 

Las aventuras de Uff #10 

Me enamoro de ti (sólo es el titulo alusivo a una de sus tontas canciones, no hay ningún romance). 

Los de Uff se toman unas vacaciones en la playa (no dicen que playa pero ahí vemos a Sebastian, de La Sirenita de Disney, haciendo un cameo). Encuentran a una niñita llorando y solidarios como siempre, se comprometen a ayudarla con su problema, el cual consiste en la obsesión de su abuelo por hacerse con un tesoro pirata basado en la anécdota de un antepasado (abren una aburrida retrospectiva de tres páginas sin los de Uff, lo que dudo mucho las fans hayan apreciado, donde hasta vemos un cliché típico del capitán pirata). Como el viejo dice que el tesoro está maldito, Marcos ya le anda sacando pero la niñita se prende de él y vuelve a llorar, logrando que se comprometa junto con los demás (que también andan preocupados, que cobardes).

Al día siguiente, toman una lancha con el anciano y la niña para buscar el tesoro, topándose con unas chicas que los invitan a una fiesta en la noche (curiosamente, nadie los está reconocimiento como celebridades en esta revista, ni la niña ni las chicas, parece que no eran tan populares después de todo). Jeanra y Fabio se ponen trajes de buceo y casi enseguida dan con el barco hundido con el tesoro (según, el viejo nunca lo encontraba solo porque nadie lo ayudaba pero no es tan difícil contratar a muertos de hambre que le hagan el trabajito).

El viejo se entusiasma (de un modo escalofriante pero nadie repara en ello, por lo visto) y los instiga a sacar el resto del tesoro cuando se aparece un tiburón. 

Contenido extra: 

• Pensando en Uff; más cartas con tonterías y cursilerías.
• Club de fans Uff; más datos sobre los clubes con saludos incluidos. 

• Uffotomania; ahora presentan las fotos con un formato más elegante y ocurrentes descripciones del contenido (¿le estoy captando mal en una de estas o el llamado Rawy le está dando un autógrafo a un chico? Bueno, como dije, en algún lado tenía que haber admiradores del mismo sexo a menos que sea para su novia o hermana o usara esa excusa, ju, ju, ju). 

• Curiosidades de Uff; variedades de datos personales poco conocidos de los miembros del grupo, individual (aunque ya no cuentan a Jeanra) o generalmente. 

Las aventuras de Uff #11 

Uff… ¡Tiburón a la vista! 

Inician con un resumen de lo anterior (nunca lo habían hecho en las anteriores, suena a que no les importa ahorrar paginas) y vuelven al encuentro con el tiburón. Fabio y Jeanra regresan a la lancha para advertirles, justo cuando el escualo los golpea desde abajo. ¡Zaz! Saltan a la noche, resultando que todo esto es una retrospectiva que Alexander les anda contando a las chicas de la fiesta. Volviendo con la historial, el viejo intenta pelear dándole con el remo pero el tiburón acaba por destruirles la lancha en una sorpresiva embestida y Fabio acaba montándose en el escualo por accidente. Alexander deja de contar, haciendo parecer que Fabio murió (pues no está presente) y Marcos sigue contando. José Luis le ofrece su navaja de explorador a Jeanra por si el tiburón se lo traga, para picarlo en la panza hasta que vomite (si saben que los tiburones devoran a sus presas después de despedazarlas y raras veces se las tragan enteras ¿verdad?). El viejo se sumerge y el tiburón (en caricaturesco efecto) se lo imagina servido como cena pero al ver a Jeanra, se le antoja aun más y va tras él.

Pausa para que Marcos se luzca antes de contar la mejor parte y volvemos al relato. Un par de pescadores ambiciosos los divisan y deciden robarse el tesoro sin echarles la mano con su predicamento. Bajo el agua, el tiburón se traga el tanque de aire de Jeanra, inflándose y quedando a merced de un trozo de madera astillada del viejo, desinflándose (¿debajo del agua? No estoy seguro de que sea físicamente posible pero de por si no lo era que su cuerpo se inflara de esa manera en primer lugar). Y de vuelta con Marcos, para hacerla más de emoción con las chicas, pasando a la última escena.

El tiburón sale todo desinflado como torpedo, derribando a los pescadores y Alexander toma su arpón para amenazarlos, castigándolos con dejarlos varados ahí en lo que ellos toman su lancha llevándose lo que pudieron rescatar del tesoro (y ya no dicen nada de que pasó con el viejo y la niña). Con eso el relato termina y lo que pasò con Fabio sólo fue lo reconocieron como “cazador temerario” por haber matado al tiburón (¡pero él no hizo nada!). 

Contenido extra: 

• Club de fans Uff; ahora en presentaciones tan breves como telegramas. 

• Pensando en Uff; más pensamientos y mensajes cursis (y otra sigue dejando sus números ¡ilusa!) 

• Uffotomania; con más fotos del nuevo, Luis Fernando (yuck, su sonrisa es demasiado perturbadora, sólo se ve bien en la foto donde tiene la boca cerrada). 

• Sopa de letras Uff (demasiado chafa y poco lograda, suena a que toman a las fanáticas por chicas con bajo coeficiente intelectual…bueno, para que les guste esa música…).